Entre hilos mujeres tejen relaciones para garantizar sus derechos
Entre puntadas, hilos y conversaciones, un grupo de más de 15 mujeres de la Casa de Igualdad de Usme emprendieron su camino en el reconocimiento de sus derechos. Con los encuentros semanales en el taller “Lencería, mujeres bordando sueños”, las mismas aprendieron sobre la elaboración de distintas piezas y sobre su potencial para la toma de sus propias decisiones.
Marcela Rodríguez, profesional de apoyo de la Casa de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres de Usme, explicó que el taller se realizó entre mujeres que por primera vez se acercaban a la Casa y que por lo regular trabajan dentro de sus hogares. Con el taller, las mujeres no solo salieron para pensar en sí mismas, sino que generaron espacios de encuentro y de escucha entre ellas.
En este grupo intergeneracional, las más jóvenes aprendieron desde lo elemental de enhebrar agujas y las de más edad a coser. Como productos crearon delantales, individuales y forros para cubrir electrodomésticos de la casa. Con cada puntada, queríamos que las mujeres en el camino de reconocer lo que pueden hacer por ellas mismas, también reconocieran sus derechos y exigirlos, explicó Rodríguez.
Los diferentes talleres de manualidades desarrollados en diferentes Casas de Igualdad de Oportunidades, también son una contribución básica a la generación de ingresos para las mujeres que no tienen un trabajo estable y tampoco desarrollan una labor pagada por fuera de sus hogares. “Venir era una motivación. Me daba paz y tranquilidad”, “Detrás del delantal, una se imagina haciendo otras cosas”, expresaban con emoción las mujeres, quienes reconocieron que tienen las herramientas a la mano para generar ingresos que aporten a su autonomía económica.
En cada una de las localidades, dependiendo de las necesidades, intereses de las mujeres y en cumplimiento de acercar los derechos y su garantía a las mujeres independientes y organizadas, la Secretaría Distrital de la Mujer, en ejercicio de escucha y promoción de la participación de las mujeres, desarrolla diferentes estrategias metodológicas y ofertas de capacitación que permitan acercar a las mujeres a las Casas de Igualdad de Oportunidades. Todas estas acciones, desde los cursos de lencería, yoga, tecnologías de la información y la comunicación, danza, encuentros psicosociales, jornadas de derechos, resignificación del espacio público, cineforos, karaokes, talleres de comunicación, se crean para informar y promover los derechos de las mujeres, los servicios de las Casas y los distintos programas con los que cuenta la Secretaría Distrital de la Mujer.
En el caso particular del curso de Lencería en Usme, las mujeres han empezado a tejer redes de apoyo social, conociendo a sus vecinas y escuchando sus realidades. La profesional de apoyo de la Casa explicó que las redes son importantes, especialmente cuando alguna de las mujeres esté frente a una situación en la que se vulneren sus derechos.
Durante el taller, las mujeres también reflexionaron acerca de los roles tradicionales que ocupan las mujeres en el hogar y de cómo pueden empezar a involucrar a los hombres en las labores domésticas. “Invitemos a esposos, hijos y a todos los hombres de nuestra casa a lavar la loza, a servir la comida. Que estos delantales que tejimos sean para todas las personas del hogar y una invitación para que ellos también hagan parte”, agregó Rodríguez.
Uno de los retos de los próximos años de la Bogotá mejor para Todas, será lograr que los hombres participen por lo menos 1 hora más en las labores de cuidado, sin que esto tenga una retribución económica. Este reto, mencionado como meta del Plan de Desarrollo, significa la transformación de los imaginarios que impiden que los hombres se sumen a las labores del hogar y del cuidado, los modelos de crianza de hijas e hijos y el asumir corresponsablemente los roles de maternidad y paternidad en Bogotá.
Vea aquí fotos del cierre de “Lencería, mujeres bordando sueños”.