Día Internacional de la lucha contra el SIDA ¿Cómo afecta el SIDA a las mujeres en Bogotá?
Desde 1.988, el 1 de diciembre de cada año se conmemora el Día Internacional de la lucha contra el SIDA, fecha en la cual se da a conocer los avances contra la pandemia causada por la infección del VIH/sida. 36 millones de personas han muerto en todo el mundo desde el comienzo de la pandemia y actualmente hay 35,3 millones de personas infectadas por el VIH en el mundo.
Según el Ministerio de Salud “desde 1985, cuando se reportó el primer caso de infección por VIH en Colombia, hasta diciembre de 2013, se han notificado un total de 92.379 casos de infección por VIH/SIDA. De los cuales, el 71% corresponde al sexo masculino”. Sin embargo, las cifras de contagio en mujeres han aumentado dramáticamente: en 1987 por cada 27 hombres infectados había solo una mujer, hoy por cada 2,5 hombres infectados hay 1 mujer infectada.
Esta afectación de las mujeres está reconocida desde finales de la década de 1990, cuando según los datos epidemiológicos se demuestra que “las condiciones de desigualdad social, cultural y política en que viven las mujeres, favorece la posibilidad de infectarse” (UNGASS, 2001).
En el 2008, buscando respuestas que permitan pensar la afectación del SIDA en las mujeres y su reducción en el contagio, el Fondo de Población de las Naciones Unidas y la Universidad Nacional de Colombia, realizaron el estudio: “Factores de vulnerabilidad a la infección por VIH en mujeres”, donde concluyeron que: “las relaciones sociales de género, explican en gran parte la mayor vulnerabilidad de las mujeres. El comportamiento de los hombres en relación con su sexualidad está en el corazón de la epidemia del sida, porque son ellos habitualmente quienes determinan las circunstancias de las relaciones sexuales y muchas veces se niegan a protegerse y a proteger a su(s) compañera/o(s)” Posteriormente en el 2011, el Ministerio de Protección Social y el Fondo de Población de las Naciones Unidas desarrolló la “Guía de Prevención VIH SIDA, para mujeres en situación de vulnerabilidad”, donde sostiene que: “las diversas formas de violencia basada en género, tienen serias implicaciones para la capacidad de las mujeres de protegerse frente la infección por VIH. La violencia basada en género es a la vez, la causa y consecuencia de la infección por VIH. Por ejemplo:
- Las niñas y las mujeres víctimas de una violación sexual, se sitúan en un alto riesgo de verse infectadas por VIH como resultado de este delito.
- El temor a la violencia puede impedir que las mujeres insistan en el uso de condones u otros métodos para relaciones sexuales más seguras.
- Las creencias erróneas sobre la diversidad sexual, o sobre las formas de transmisión del virus de inmunodeficiencia humana, sirven de sustento a violaciones y abuso sexual.
- La revelación de su estado de salud a sus compañeros y compañeras, personas de su familia y comunidades, las convierte en muchas ocasiones, en “blanco” de abusos físicos y emocionales, incluyendo el abandono de su pareja y el rechazo familiar. Por ello, muchas mujeres no revelan su resultado, o ni siquiera lo reclaman por temor; lo que limita la posibilidad de llevar a cabo prácticas de autocuidado.
En Bogotá particularmente, la Secretaría Distrital de Planeación retoma algunas mediciones frente al nivel de conocimiento y prácticas de protección de las mujeres frente a la infección por VIH en Bogotá, realizadas a partir de Encuesta Distrital de Demografía y Salud 2011, donde se hace necesario señalar que el 54.2% de mujeres habitantes en Bogotá nunca se ha hecho una prueba de SIDA, pese al incremento de mujeres infectadas.
Los retos de Bogotá frente a la propagación del SIDA entre las mujeres están asociados justamente a las principales causas identificadas y podrían considerase algunos como:
- Brindar mayor información sobre el tema, así como recursos para poner en práctica medidas preventivas, reduciendo las tasas de infección.
- Informar sobre los derechos sexuales a niñas y mujeres para que puedan tomar medidas de autoprotección y exigir o acordar con sus parejas prácticas de sexo seguro.
- Realizar campañas que permitan deconstruir los imaginarios asociados a la vida sexual de las mujeres y a las dinámicas de poder en las relaciones de pareja que han sometido históricamente a las mujeres a prácticas sexuales decididas por los hombres, incluyendo abuso sexual y prácticas de riesgo.
- Transversalizar el enfoque de derechos de las mujeres en las políticas de salud y en las medidas de prevención y atención realizadas en Bogotá, que permitan a las mujeres acercarse al personal de salud con confianza y puedan recibir información y atención de calidad.
- Diseñar estrategias que permitan brindar información y acceso a las mujeres rurales para que se realicen la prueba del VIH, dado que según la encuesta de demografía y salud 2011, es en la localidad de Sumapaz donde habita el mayor porcentaje de mujeres que nunca se ha hecho la prueba del virus.
Estos retos se constituyen en acciones afirmativas que se deben emprender para eliminar otra de las formas de violencias que afectan las mujeres.