Un hecho sucedido el 14 de julio de 1997 estremeció a la ciudadanía. Una niña murió a la madrugada en la localidad de Bosa después de varios procedimientos médicos. El parte legal de su muerte mostró que la causa fue una violación perpetrada de manera sistemática por su padrastro durante meses. El hecho motivó a un grupo de lideresas a proponer la realización de una toma simbólica, un abrazo multitudinario para rechazar este hecho, y a través de él todos los que lamentablemente continúan sucediendo a diario contra niñas, niños y mujeres.
Desde el 2007 se fortaleció esta acción colectiva que hoy en día se conoce como el plantón “Ni una niña, ni un niño, ni una mujer más violada en Bosa, ni una más”, donde las organizaciones de mujeres, lideresas, habitantes e instituciones de la localidad se dan cita los primeros viernes de cada mes en la plaza Fundacional de Bosa en una manifestación de resistencia civil pacífica y política, que busca visibilizar y rechazar los actos de violencias contra las mujeres, niñas y niños.
El plantón simboliza el compromiso por la erradicación de las violencias, manifestado a través de muestras culturales, artísticas, ferias y cánticos que buscan sensibilizar a la ciudadanía y exigirle al Estado acciones que garanticen el derecho a una vida libre de violencias para las mujeres. En el plantón de Bosa, las mujeres cada mes pregonan: “ayer estábamos en silencio y con miedo, hoy juntas y juntos nos sumamos y multiplicamos para decir: las mujeres diversas de Bogotá decimos, no más a las violencias de género, respeto a nuestros derechos humanos”.
Como esta, son varias las iniciativas de la sociedad civil que buscan hacer eco en Bogotá y el mundo sobre la eliminación de todo tipo de violencias contra las mujeres, concienciando y sensibilizando sobre esta problemática. Hoy compartimos con ustedes algunas de ellas, que pueden inspirar nuevas acciones ciudadanas.
Perú: “Paremos el acoso callejero”
Una de las experiencias latinoamericanas que ha inspirado la acción es iniciativa peruana “Paremos el acoso callejero”, iniciada en el 2011 y que posteriormente abrió un mapa virtual que permite registrar los casos de acoso donde a través de las narraciones de las mujeres se clasificó el asedio en 13 categorías, desde silbidos hasta masturbación pública.
El grupo peruano inspiró a mujeres en otros países y en Colombia se creó el Observatorio contra el Acoso Callejero (Ocaccol), con el apoyo de los grupos de Perú y de Chile. La iniciativa colombiana tiene dentro de sus objetivos realizar debates en espacios públicos para explicar cómo el asedio en las calles es un tipo de violencia.
Bogotá: Fem Hip Hop Paz
En la localidad de Usme, Aguila Tway, artista, compositora, intérprete, productora musical y promotora de la cultura hip hop, en el año 2009 creó la organización llamada FEM HIPHOP PAZ, proyecto que consiste en apoyar líneas de formación y circulación de mujeres artistas y la apropiación de espacios con arte y cultura.
FEMHIPHOP PAZ es una organización conformada por mujeres lideresas de la localidad de Usme, que busca promover y capacitar muestras artísticas desarrolladas por las mujeres, por medio de talleres de formación y conciertos itinerantes a nivel local y Distrital en su mayoría auto gestionados con el fin de empoderarlas.
Se han enfocado en la superación de las desigualdades e inequidades que aquejan a las mujeres. Para ellas educar a través del hip-hop significa “más que enseñar cómo componer un rap, tocar un instrumento o grabar un disco, es tener la oportunidad de formarse, conocer sus derechos como mujeres. Es comprender que términos como autoafirmación, denuncia, visibilidad, información, identidad y autoestima pueden ser más que simples palabras lanzadas al viento” afirma Aguila Tway.
En el año 2013 realizaron el primer festival autogestionado llamado FEMHIPHOP PAZUR en alianza con la organización hiphop pazur, el cual contó con la participación de diferentes artistas mujeres lideresas de varias localidades. En este evento se logró consolidar la red de mujeres de movimiento hiphop a nivel Distrital, impulsando sus habilidades artísticas con una apuesta de conciencia, paz, convivencia e identidad con enfoque de género en el territorio.
Israel: Red internacional de Mujeres de Negro
La Red Internacional de Mujeres de Negro creada desde 1988, cuando mujeres israelitas decidieron manifestarse públicamente contra su propio gobierno, vestidas de negro, en silencio como protesta contra de la guerra y la ocupación de los territorios palestinos por parte de Israel. Desde ese momento, mujeres pertenecientes a movimientos antimilitaristas y feministas de países que se encontraban en conflicto o solidarias con sociedades en situaciones de conflictos bélicos, se han sumado a esta iniciativa hasta crear la Red Internacional de Mujeres de Negro contra la guerra, que en la actualidad reúne a un sinnúmero de organizaciones de mujeres alrededor de todo el mundo.
Las Mujeres de Negro contra la guerra han asumido el feminismo, el pacifismo, el antimilitarismo y la defensa de los derechos humanos, en especial los de las mujeres, como principios comunes que alimentan su accionar y resistencias. Su simbología se representa por el color negro, que significa el luto permanente en el que se encuentran las mujeres por ser víctimas de las guerras; y por el silencio, ante la falta de palabras que puedan expresar todos los horrores de las guerras y las violencias contra ellas.
Colombia: Ruta Pacífica de Mujeres
En Colombia, la Ruta Pacífica de las Mujeres integra la Red Internacional de Mujeres de Negro, y desde su origen en 1996 realiza acciones movilizadoras, simbólicas, sociales y políticas en contra de la guerra, en donde exige a los actores armados a participar en un diálogo y negociación política del conflicto y el respeto por las normas del Derecho Internacional Humanitario.
Con la vinculación a la Red Internacional de Mujeres de Negro, la Ruta Pacífica realiza los últimos martes de cada mes, los plantones de Mujeres de Negro en espacios públicos y lugares representativos de las principales ciudades colombianas. Esta acción hace parte de la movilización de la Ruta, aportando a la construcción de sujetas sociales y políticas que se manifiestan permanentemente en contra de la guerra.