En el marco del “Seminario de experiencias en derechos sexuales y derechos reproductivos y avances en su garantía para las mujeres en el Distrito Capital”, que se llevó a cabo el pasado 9 y 10 de julio en Bogotá, la SDMujer en entrevista con algunas de las expertas que participaron como ponentes, indagó sobre las barreras y dificultades que tienen que afrontar las mujeres en Colombia en cuanto a estos dos derechos y las estrategias para avanzar en su garantía. Esto fue lo que ellas respondieron:
Alejandra Coll/ Womens Link Worldwide
SDMujer: ¿Por qué son importantes los Derechos Sexuales y los Derechos Reproductivos de las mujeres?
AC: Son Derechos fundamentales, Derechos Humanos que de hecho fueron reconocidos hace poco por la Sentencia Artavia Murillo, en donde se dejan mucho más claros y se eleva su estatus. Desde Womens Link Worldwide hemos estado trabajando para que este reconocimiento llegue a todos los sectores que atienden mujeres, especialmente porque son derechos que afectan la vida y la integridad de ellas.
SDMujer: ¿Por qué este tipo de espacios tienen importancia para las mujeres y para la organización que usted representa?
AC: Una de nuestras misiones como organización es generar debate sobre estos temas, creo que uno de los grandes problemas es que no se habla mucho de ello, son temas que no se tocan, no se dicen y en los que alrededor existen muchos tabúes.
Lo que queremos es que este tipo de espacios de debate (seminario) y de construcción, se den con mucha más frecuencia… de hecho celebramos que sea hoy una iniciativa del Distrito para que se genere un debate abierto, exista información pública para que las mujeres sepan qué hacer, a dónde acudir y a qué servicios pueden acceder.
SDMujer: ¿Cuál es el aporte de Womens Link Worldwide en este seminario?
AC: Estamos trabajando en la objeción de conciencia y las reglas constitucionales para objetar conciencia y cómo se debe hacer esa objeción para no afectar los derechos de las mujeres.
La objeción de conciencia es un tema que normalmente no se usa de la mejor manera, es un tema que falta desarrollar y sobre el que se deben hacer debates, porque los profesionales de la salud necesitan más información para poder objetar y usar este recurso (que también es un derecho fundamental), la idea es buscar un equilibrio entre este y el derecho fundamental de las mujeres a acceder a servicios de salud.
La Corte Constitucional en la sentencia C355 dice que en todos los casos que sea posible se deben respetar los dos derechos fundamentales, el de los profesionales en salud que objetan conciencia y pueden remitir el caso al profesional en salud más cercano y el de las mujeres que tienen derecho a decidir, es decir que se debe garantizar los derechos de los unos y los otros.
No todos los casos son simples, por ello hay que abrir el debate para poder dar solución a los casos complejos, sin que ninguna de las partes vea afectados o vulnerados sus derechos fundamentales.
SDMujer: ¿De qué manera además de la objeción de conciencia abordan el tema de los derechos sexuales y los derechos reproductivos?
AC: Desde Womens Link Worldwide estamos promoviendo una campaña en medios de comunicación para la atención en salud a mujeres víctimas de violencia sexual, ya que muchas de las víctimas de este tipo de violencia no pueden acceder a salud en Colombia. Por ello queremos que sea aplicado y obligatorio el protocolo para atención en salud a estas mujeres; que las y los profesionales de salud lo conozcan en todo el territorio nacional.
El paquete de atención es facultativo por la ley 1719 y hemos iniciado una acción ante la Corte Constitucional al respecto para que sea obligatoria nuevamente, y que las mujeres víctimas de violencia sexual tengan atención inmediata, eficaz y digna.
Soledad Díaz Pastén / Médicos del Mundo Francia en Colombia
SDMujer: ¿Cuál es el aporte de Médicos del Mundo en este seminario?
SD: Queremos compartir el quehacer de una organización médica internacional humanitaria, acercando el derecho a la salud de las personas y específicamente de las mujeres en las zonas de conflicto armado… la idea es compartir cómo trabajamos con personas en estado de vulnerabilidad. Con relación a los derechos sexuales y los derechos reproductivos, lo que hacemos es un trabajo de abogacía e incidencia política para el reconocimiento de esos derechos y para que se reconozca el derecho a decidir en caso de un embarazo no deseado.
Trabajar en zonas de conflictos armados es una de nuestras misiones… estamos en Colombia, en República Democrática del Congo, en Siria, en Palestina, en lugares donde en medio del conflicto armado el derecho a la salud se rompe abruptamente. Dentro de estos derechos también se rompen abruptamente los derechos relacionados con la sexualidad y la reproducción de las niñas, los niños y las mujeres.
El tema de la violencia sexual es algo que en el conflicto armado es repetitivo, de allí que tengamos estrategias para atender esa violencia sexual en las mujeres, que puede traducirse en un embarazo forzado, un embarazo no deseado, esterilización forzada o cáncer de cuello uterino como consecuencia de la violencia sexual.
SDMujer: ¿Cuál es el panorama que han visualizado en Colombia?
SD: En Colombia estamos presentes con trabajo en acceso a la salud en Meta, Guaviare y Nariño… trabajamos desde una perspectiva en atención primaria de la salud y en ese modelo de atención se incluye la atención a la salud sexual y a la salud reproductiva para todas las personas y sobre todo la atención y prevención a embarazo no deseado. En la prevención procuramos el acceso a métodos modernos de anticoncepción, y en atención (como lo contempla el marco constitucional vigente en Colombia) apoyamos a las mujeres para que puedan ejercer su derecho a decidir.
En medio de los conflictos armados la violencia sexual y otros delitos tipificados en el Derecho Internacional Humanitario (esterilización forzada, embarazo forzado, prostitución y esclavización sexual) hemos encontrado muchos casos de embarazo no deseado… asociados a violencia sexual; si estas mujeres deciden interrumpir el embarazo las apoyamos hasta las doce semanas de gestación y si es una mujer que tiene más semanas de gestación, vamos a acudir a todas las rutas de apoyo a las mujeres, las acercamos a atención en salud por parte del Estado con el objetivo que si así lo deciden puedan interrumpir su embarazo.
Carolina Melo/ Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres
SDMujer: ¿Cómo aportan desde la Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres en la garantía de los Derechos Sexuales y los Derechos Reproductivos de las Mjujeres?
CM: Uno de los trabajo que adelanta la Mesa es el acompañamiento a mujeres que en los tres casos que permite la ley han decidido interrumpir voluntariamente el embarazo, y no saben cómo hacerlo o enfrentan muchas barreras en el sistema de salud, de justica y de protección.
La Mesa es una de las organizaciones que tiene información de primera mano de cuáles son estas barreras que se presentan a la hora de acudir a la interrupción voluntaria del embarazo como lo determina la sentencia C355.
Uno de los factores con los que nos hemos encontrado es la falta de información de las mujeres sobre sus derechos, y especialmente la falta de información de los prestadores de salud, de protección y justica y también la falta de institucionalización de estos temas que garanticen los servicios, más allá del funcionario de turno o la voluntad política de quién esté al frente.
SDMujer: ¿Cómo aporta a la garantía de los derechos de las mujeres un Seminario como este?
CM: Un evento como el Seminario, que se lleva a cabo para hablar abiertamente de estos temas, ayuda a eliminar las barreras asociadas a este asunto…son las instituciones responsables de garantizar el servicio de salud quienes deben decirle a las médicas y médicos cómo deben prestar el servicio, de acuerdo a lo que ha establecido la Corte Constitucional.
SDMujer: ¿Cuáles son las berreras más comunes que encuentran las mujeres en Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos?
CM: Las barreras en la interrupción voluntaria del embarazo… desde la Mesa se han acompañado casi mil casos desde el 2006, hasta hoy.
Hay un gran componente asociado a la falta de información sobre la normatividad y sobre lo que dicta la sentencia C355, tanto para las mujeres como para los prestadores de servicios… en general hay un gran problema de falta de información y por ejemplo en algunos casos los operadores de salud prefieren no enterarse de lo que establece la ley y omitirlo.
Por otro lado las barreras relacionadas en fallas en la prestación del servicio: demoras injustificadas, tramites que no son legales que exigen las entidades prestadoras de salud, juntas médicas que no deben hacerse en estos casos, dilación de la prestación del servicio y entidades de prestación de servicios que no cuentan con redes de prestación de servicios disponibles… un problema muy serio con mujeres que llegan en edades gestacionales avanzadas.
Por otro lado, entre las barreras que las mujeres encuentran, está la objeción de conciencia practicada de manera irresponsable… se ve en algunos casos que las entidades prestadoras de salud toman este recurso (no como una excepción para prestar el servicio) como una manera de poner obstáculos a las mujeres para prestar el servicio de salud. No se trata de presentar este recurso para acceder a un derecho, sino que se utiliza para negar un derecho, en este caso los derechos de las mujeres.
Hay otras barreras relacionadas a lo cultural asociadas al estigma y los prejuicios, que hacen muy difícil a una mujer asumir que requiere una atención en salud para la interrupción voluntaria del embarazo.
SDMujer: ¿Cuáles son las recomendaciones de la Mesa para eliminar dichas barreras?
CM: Hay medidas a corto plazo… como el proceso de difusión que brinde información clara y oportuna a mujeres y a prestadores de servicios de salud en la normatividad asociada a la interrupción voluntaria del embarazo.
Seguimiento a las entidades prestadoras de salud para tomar medidas y sancionar a aquellos que no brindan un servicio adecuado y donde se presenten fallas en la prestación del servicio.
A largo plazo… hay que tener en cuenta la necesidad de avanzar en entrenamiento a prestadores de servicio de salud como médicas y médicos generales, ginecólogas y ginecólogos, de manera que tengan claro el marco legal en el que van a desempeñar su labor profesional.
Hay problema con entrenamiento a médicos prestadores de salud que se traducen en altos costos para los procedimientos, ya que se emplean métodos que en ocasiones no los más indicados y que resultan riesgosos para la salud de las mujeres.
Por último hay que seguir avanzando en el compromiso institucional, ya que el derecho a decidir está incorporado en todos los marcos de política pública, en marco de sistemas de salud colombiano y en el marco de suscripción de acuerdos internacionales aceptados por Colombia… los insumos están dados, falta el compromiso y la voluntad política.