#Gracias Profe: con semilleros de género, maestras combaten el machismo en las aulas
Aunque más del 75 por ciento de las maestras y maestros de los colegios públicos de Bogotá son mujeres, aún hablar de equidad de género en las aulas resulta ser un tema desconocido y muchas veces tabú, así lo describe Ana Mercedes Díaz orientadora del colegio Prado Veraniego, de la localidad de Suba, quien junto a un grupo de maestras y 2 maestros conforman los semilleros de género de este sector del noroccidente de la ciudad, desde hace 3 años.
“Las maestras y los maestros no solo vamos a enseñar a leer y a escribir, sino a formar personas para la vida y esa vida no tiene que repetir errores. Debemos generar formas en que las relaciones de equidad de género sean lo más natural del mundo”, agrega Díaz, quien desde su semillero trata temas como las violencias contra las mujeres, derechos sexuales y reproductivos y la extinción del machismo.
Lo semilleros de género son grupos de estudiantes que promueven profesoras y profesores buscando promover el conocimiento de los derechos de las mujeres y la equidad de género. De hecho, estos espacios surgen porque en los colegios, de acuerdo con las maestras, también se evidencia la cultura machista a través de expresiones y actitudes.
En el proceso que se hace con los semilleros, niñas, niños y jóvenes revisan estereotipos de mujeres y hombres, identifican las diferencias y las conductas sexistas de la escuela, a través de la lectura, el arte y diferentes actividades lúdicas. “Con esto sembramos la inquietud de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Inquietudes que luego llevarán a sus hogares y con la que pretendemos impactar en la localidad”, agrega Díaz.
Una de las iniciativas más curiosas surgió del Colegio República Dominicana. En esta escuela, por petición de las estudiantes del semillero, se creó el “Miércoles de canchas violetas”. Un proyecto en el que las niñas se tomaban la cancha para jugar fútbol, un escenario que se creía que solo les pertenecía a los niños.
“Cuando se evidencian estas diferencias y ellos reflexionan sobre las mismas, empiezan a tener conciencia. Con este ejercicio se dio espacio para los equipos de fútbol femenino y luego la cancha se convirtió en escenario de partidos mixtos”, explicó Magda Díaz, bibliotecóloga que dirigía el semillero de este colegio.
Los semilleros forman parte de la Red de Educación para la Equidad de Género, de la localidad de Suba y de la cual no solo hacen parte colegios de la zona, sino entidades como el Hospital de Suba, la Alcaldía local y la Casa de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres, de la Secretaría Distrital de la Mujer.
Desde la red, y por ende en los semilleros, se espera formar en derechos a los más pequeños de la localidad y formar ciudadanos y ciudadanas con relaciones basadas en esta equidad. Y es un hecho que los resultados empiezan a verse: las maestras evidencian niñas empoderadas y niños que reconocen los derechos de las mujeres y transforman sus creencias, actitudes y acciones para lograr la igualdad. Esto se ve especialmente en la manera como piensan y asumen la corresponsabilidad del hogar.
Las maestras reconocen que aún queda mucho camino por recorrer y piden a sus colegas no estigmatizar el trabajo de equidad de género dentro de las aulas. “A las maestras que se resisten al tema es importante recordarles que no deben tener temor de mostrar estas situaciones de vulnerabilidad por las que hemos pasado por ser mujeres y es nuestra responsabilidad como maestras construir estas nuevas realidades”, puntualiza Ana Mercedes Díaz.
Hoy agradecemos a las maestras y maestros que trabajan tejiendo nuevos mundos de igualdad para niñas y niños en Bogotá.
#Gracias Profe por un educación con equidad